Little funny things!
En este nuevo reto de autonomía para #CircutorElectroChallenge rinde tributo a uno de los primeros coches que se electrificó desplazando el modelo de combustión, el smart EQ forfour , conduciendo hasta el límite de su capacidad, empleando, como siempre, nuestras mejores habilidades de conducción eficiente y tranquila.
El smart, marcó una revolución de estilo en la movilidad de muchas ciudades en el momento de su primera aparición, en el año 2004. Un coche diminuto pero con las prestaciones y calidad de un vehículo de verdad.
En el año 2007 se lanza la primera versión electrificada de dos plazas y en 2016 aparece ya esta versión con 4 plazas acompañando la versión Cabrio. Sólo disponibles en eléctrico desde 2019. smart fue la primera marca en hacer la reconversión total.
Estos resultados igualan bastante su consumo tanto en el entorno urbano como en interurbano con conducción eficiente y tranquila, lo que nos permite diseñar nuestro reto sin muchas limitaciones.
Hay que decir que hemos echado en falta la opción de incrementar la retención del motor eléctrico y, de esta manera, recuperar más energía en bajadas prolongadas y a la entrada de algunas rotondas que permitirían alguna mejora en la autonomía y reducción en el uso de los frenos térmicos.
Haremos un reto de sábado y esperamos tener una mañana de buen tiempo que nos permita descubrir nuevas rutas, aún por descubrir en nuestras electro-aventuras.
El forfour transmite, como todos los eléctricos urbanos sensaciones de libertad y agilidad en la conducción por ciudad. Con 3,5 m de longitud es el rey de la búsqueda de aparcamientos en las calles concurridas y, con menos de 7 m de radio de giro, permite incluso, cambiar de sentido en cualquier calle de dos carriles.
También hay que mencionar una característica muy remarcable y es la carga trifásica a 22 kW de potencia que le permite recuperar su batería, de forma completa en poco más de una hora haciendo de la carga lenta, carga rápida.
Hoy, desde hace muchos retos, no madrugamos, es la ventaja de los coches pequeños. Esta y la de poder entrar y salir del aparcamiento sin ninguna maniobra.
Desconectamos el smart de la toma trifásica de la Urban que tenemos en la sede de Circutor, en Viladecavalls. Es una pasada cargar en menos de una hora sin tener que buscar puntos DC.
Bajamos junto al mar, a las playas de Castelldefels, y Les Botigues de Sitges en un día radiante que nos transporta más, a las sensaciones de verano que a esta primavera seca y soleada que estamos teniendo.
Hemos cubierto poco más de 50 km de terreno muy favorable, con un consumo de 9 kWh/100 km y tenemos unos 130 km de autonomía gracias a retener un 70% de batería.
En este punto, hacemos un cambio de guion y enfilamos la subida a la zona de escalada del Pico del martillo adentrándonos en pleno Parque Natural de El Garraf. Es una subida muy exigente ya que nos llevará a una altura de 240 m sobre el nivel del mar en poco más de 2 km superando el 10% de inclinación. Y lo podemos ver en las valientes que lo hacen en bicicleta y que parecen estatuas.
Una vez en la cima, la altura nos regala vistas del mar hacia el este y toda la sierra del ladrón en nuestro frente.
La carretera se convierte en estrecha y llena de curvas con unos toboganes enlazados que el forfour negocia a la perfección.
64 km de aventura y toca detenerse frente a la serenidad del Palau Novella, sede del monasterio budista Sakya Tashi Ling donde hacemos ofrenda de los kilómetros recorridos y aprovechamos para encomendarnos a la paz que se respira para alcanzar el mejor de los resultados en nuestro reto.
Aquí, nuestro consumo muestra la dificultad del terreno con 12,6 kWh/100 km y poco más de 90 km de autonomía con el 60 % remanente de batería. El pueblo de Olivella está en el extremo oeste del Parque, aquí, los palmitos dan paso a las viñas que nos indican nuestra proximidad al Penedès.
70 km recorridos y mitad de batería utilizada, con un consumo que hemos moderado hasta los 12,2 kWh/100 km.
La iglesia de Sant Pere Molanta es nuestra siguiente parada. Una construcción que data del año 991 donde se respira la tranquilidad de las zonas rurales. Del budismo al catolicismo más tradicional, qué baño de realidad.
Aquí, son ya 82 km de ruta con el pequeño smart, con un consumo que hemos conseguido rebajar hasta 11,6 kWh. Tenemos la batería exactamente al 50% y una autonomía calculada por el coche, exactamente igual a los kilómetros recorridos.
La incorporación de la N-340 nos obliga a subir la velocidad y, por lo tanto, también el consumo. Especialmente al dejar atrás y encarar la subida del puerto del Ordal, con 487 m de altura y donde nuestro consumo se eleva por encima de los 13 kWh/100 km.
15 km de descenso pronunciado, hasta conectar con la A-2 a Molins de Rei, nos permiten volver a poner a raya los consumos y trepar el último tramo con total confianza.
Dejamos la autovía en Abrera, después de haber conducido 122 kilómetros con un consumo medio de 11,2 kWh/100 km. La batería está al 27% de su capacidad y el vehículo nos indica una autonomía 40 km.
Culminamos nuestra pequeña aventura por la carretera de Olesa a Viladecavalls y por la C-58 hasta Terrassa, pasando frente a la sede corporativa de Circutor y llegamos a casa a punto para comer y con batería suficiente como para volver el lunes a hacer las pruebas de compatibilidad de carga con los compañeros del laboratorio de Circontrol.
Conclusión:
Una gran experiencia. Sabíamos que la primera parte de la ruta, por el tipo de vía y por lo tanto velocidades limitadas, encajarían a la perfección con un consumo reducido, pero, nos ha sorprendido positivamente que, tanto en la subida del puerto como por autovía, nuestro consumo ha continuado siendo muy contenido y cercano a la homologación.
Queda claro, qué el smart EQ forfour es una de las opciones más económicas para acceder a la electromovilidad y qué, además nos permite hacer este tipo de escapadas de la ciudad sin ningún tipo de problema. Lástima que desaparezca del mercado dando paso a una nueva generación smart de la que dará mucho que hablar.
Agradecimientos:
Aclaraciones:
La vuelta Solidaria, es un recorrido de 20 km con salida y llegada a la sede de Circutor, en Viladecavalls, que transcurre por carreteras secundarias, muy reviradas y con desniveles de hasta 250 m.
La vuelta EcoBest, es un recorrido mixto de 60 km que incluye, aproximadamente, un 50 % de autopista, un 25 % de ciudad y el resto en vías interurbanas, muy similar a la distribución del ciclo WLTP.
Todos nuestros retos, se basan en conseguir la máxima autonomía, en condiciones de circulación real, empleando técnicas de conducción eficiente i velocidades moderadas, siempre por encima de la mínima marcada en cada vía.
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