Evitar penalizaciones por consumo de reactiva y por exceso de máxima demanda nos asegura no tener un incremento inesperado en la factura eléctrica.
Las compañías eléctricas disponen de varios conceptos para imputar penalizaciones en la factura eléctrica a aquellas instalaciones que exceden de los requerimientos marcados por la legislación o superan los valores definidos en su contrato de suministro. Estos requerimientos están referidos al consumo de energía reactiva, tanto inductiva como capacitiva, así como el exceso de consumo en la potencia contratada, variando en función del país.
La instalación de sistemas de compensación de reactiva y de control de máxima demanda, evitan el recargo mensual de penalizaciones que incrementan nuestros costes energéticos. Actualmente, existe una gran cantidad de instalaciones que pagan mensualmente estos sobrecostes, sin ser conscientes de que existen soluciones para evitarlos. Por este motivo es imprescindible saber qué producto instalar para cada situación.
Las baterías de condensadores evitan sobrecostes en la factura eléctrica por consumo de energía reactiva inductiva y aumentan el rendimiento de tu instalación.
Los compensadores estáticos SVGm compensan tanto la energía reactiva capacitiva como inductiva para evitar cualquier tipo de de penalización en la factura eléctrica, incluso en redes con alta presencia armónica.
Evita sobrecostes en tu factura eléctrica por exceder la potencia contratada de tu instalación, desconectando las cargas no críticas en momentos puntuales mediante controladores de máxima demanda.
Para asegurar el rendimiento de los sistemas de transmisión y distribución eléctrica, las compañías eléctricas obligan a los usuarios finales a controlar el consumo máximo de energía reactiva, tanto de inductiva como de capacitiva. La forma que las compañías eléctricas tienen para contabilizar estos excesos de energía reactiva, es marcando un coseno de phi mínimo. El no llegar a conseguir dicho valor, supondrá un sobrecoste en la factura eléctrica.
Las baterías de condensadores son los equipos que permiten evitar penalizaciones por exceso en consumo de energía reactiva inductiva.
Estas soluciones disponen de uno o varios condensadores que, de manera automática a través de un regulador de reactiva, se conectarán o desconectarán dependiendo de las necesidades de la instalación.
La conexión de condensadores genera consumo de energía reactiva capacitiva inverso al producido por cargas inductivas, llevando a la instalación a un coseno de phi adecuado para evitar penalizaciones a final de mes.
La selección de una correcta batería de condensadores dependerá de la tipología de cargas de la instalación. Por este motivo, su correcta selección está sujeta a las condiciones de trabajo de cada industria. Existen 4 tipos fundamentales de baterías cuya selección variará en función de dos aspectos: ¿la carga varía lentamente o rápidamente? ¿Existen armónicos en la instalación?
El exceso de consumo de energía reactiva capacitiva nos puede llevar a incurrir en penalizaciones en la factura eléctrica, dependiendo del país, así como generar sobretensiones en nuestra instalación, pudiendo dañar los sistemas electrónicos que provocan paradas de servicio.
Instalaciones como centros logísticos, centros comerciales, grandes edificios e infraestructuras suelen consumir energía reactiva capacitiva. Instalaciones con una alta carga de iluminación LED, sistemas informáticos, centros de datos, largos tramos de cable como aeropuertos, tranvías, estaciones de esquí, grandes recintos feriales o túneles, entre otros, son normalmente consumidoras de energía reactiva capacitiva.
Esta energía no se puede compensar mediante el uso de condensadores ya que su conexión agravaría la situación, por lo que la única solución viable es la instalación de generadores estáticos de reactiva.
Esta solución funciona mediante el uso de electrónica de potencia, que permite la programación de un coseno de phi objetivo para compensar el exceso tanto de reactiva inductiva como capacitiva, evitando cualquier penalización en la factura eléctrica.
Descubre más características de nuestro generador estático de reactiva SVGm.
A la hora de contratar un nuevo suministro eléctrico, hemos de definir la potencia máxima a demandar de nuestra instalación.
Superar una sola vez la potencia contratada de nuestra instalación, supondrá un recargo en la factura eléctrica. La conexión de gran cantidad de cargas en un mismo periodo de tiempo puede suponer que excedamos la potencia contratada, teniendo un sobrecargo en la factura energética, que en ciertos países puede acarrear una penalización constante durante todo el año.
Para evitar este tipo de penalizaciones, existen los controladores de máxima demanda, que analizan constantemente la potencia demandada por la instalación y desconectan las cargas no críticas cuando el equipo prevé que dicha potencia va a exceder de la potencia contratada en la instalación.
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