Para cumplir con los objetivos de sostenibilidad y mejorar la movilidad de los ciudadanos, los municipios disponen postes de recarga en vías públicas para ofrecer el mejor servicio a los usuarios de vehículos eléctricos. Estas soluciones permiten tanto aumentar la autonomía de sus vehículos durante su tiempo de ocio como la recarga total de la batería en función del tiempo de carga dedicado.
La conectividad es otro aspecto relevante a resolver, ya que el gran tránsito de usuarios hace que tengamos que evitar posibles fraudes. Para ello, la solución Circutor dispone de equipos con autenticación por RFID para habilitar al usuario la recarga de su vehículo, bloqueando la manguera cuando esté cargando, para evitar desconexiones por parte de terceros, o para desbloquearla una vez regresamos al aparcamiento, evitando cualquier tipo de fraude entre usuarios.
Mediante comunicaciones Ethernet, los equipos envían información en tiempo real al software de gestión y control para conocer el estado de carga de cada cargador, monitorizar valores instantáneos e interactuar remotamente con los elementos del sistema, pudiendo realizar tareas remotas de supervisión.
Los modelos URBAN master/slave permiten mejorar los costes de cualquier instalación ya que están basados en un máster con comunicaciones integradas, Ethernet o 4G, que evita la implementación de comunicaciones en cada equipo esclavo, ahorrando en coste y mejorando la operativa con los softwares de gestión de puntos de recarga mediante el protocolo OCPP.